martes, 19 de mayo de 2009
El león tuerto
Su nombre era Simón.
Perdió un ojo en las vicisitudes de la vida.
Si bien Simón era tan sólo un león de peluche, su supervivencia también estaba en riesgo, tal como si estuviese en la selva.
Un león de peluche al que se le ha caído un ojo es propenso a ser desechado por su propietario, que en este caso era un niño de seis años llamado Leonardo.
Para la fortuna de Simón, Leonardo lo quería mucho, y decidió conservarlo a su lado a pesar de ser tuerto.
A cambio de eso, el agradecido león de peluche dio a Leonardo mucho afecto durante muchas noches, a la hora de irse a dormir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario